Más de uno se ha planteado entrar en una cafetería tras hacer ejercicio. Sales de quemar calorías y te apetece tomar algo, porque tú lo vales y porque te lo has ganado. Pero entonces te surge el remordimiento. ¿Qué hacer? A veces no es fácil decidir, pero nosotros vamos a intentar echarte una mano.
Aunque el campo de la dietética evoluciona rápidamente gracias a los estudios que se realizan, parece que hay un cierto acuerdo sobre el contenido calórico de algunos alimentos. A continuación, te dejamos alguna pista para que te puedas dar un capricho en las cafeterías del ZigZag: Delicioso, Altillo, Oliver Irish Pub, Amazonia, Loto Shake & Café sin sentirte demasiado mal.

Café y desayuno
Cuantas menos cosas se le añadan a la bebida, mejor. Es decir, mucho mejor un café sin leche y sin azúcar. Algunas variedades de café o maneras de elaborarlo rebajan el contenido calórico. Puedes preguntar en la cafetería y te asesorarán al respecto. También puedes elegir una infusión. Y si quieres además comer algo, opta por unas tostadas de pan integral con queso fresco.

Aperitivo
En la hora del aperitivo, puedes escoger un refresco sin azúcar. Si el cuerpo te pide unos grados, una de las opciones con menos calorías, aunque quizá no sea muy usual, es la sidra. Si eres cervecero y no lo puedes evitar, la sin alcohol te engordará menos. Para picar puedes pedir unos frutos secos que, en cantidades moderadas, no suelen ser muy perjudiciales. Algunos encurtidos, como los pepinillos, también son buena opción.

Copas
Si quieres tomar algo en una cafetería después de hacer ejercicio y darte un capricho con una copa, la opción más aceptable es el Gin Tonic. En general, puedes disminuir las calorías de cualquier combinado si el refresco es light. Otra de las alternativas mas favorables es el tequila, sobre todo rebajado con agua y hielo. Aunque, sin duda, la mejor opción en general es beber con moderación.

Cóctel
Pero si lo que te apetece de verdad es un cóctel, te decimos cuáles son los que menos van a contrarrestar tus horas de ejercicio. Una buena opción sería el Bloody Mary, que pese a tener un nombre algo inquietante, es unos de los cócteles con menos calorías. De la misma manera destacan el Cosmopolitan y el simple aunque sofisticado Martini.